Pancho Villa
Pancho Villa o Francisco Villa, cuyo nombre verdadero es José Doroteo Arango Arámbula, nació en La Coyotada, pequeña población de San Juan del Río, Durango, el 5 de junio de 1878 y murió en Parral, Chihuahua, el 20 de julio de 1923.
Hijo de Agustín Arango y María Micaela Arámbula, mestizos de origen humilde y sin estudios. Él tampoco tuvo oportunidad de ir a la escuela, aunque si aprendió a leer. Quedó huérfano siendo aún niño, trabajó como leñador, agricultor y comerciante.
En el año 1984, a la edad de 16 años, entró a trabajar como peón en la hacienda Sombreretillo de la familia López Negrete y ese mismo año tuvo que huir al asesinar al dueño de la hacienda, Agustín López Negrete quien violó a su hermana mayor. Doroteo Arango empieza a ser perseguido por este hecho y huye, y se va a vivir a la sierra en dónde estuvo a punto de perder la vida a causa del hambre.
Se une a una pandilla de bandidos encabezada por un hombre llamado “Francisco Villa”, del cual se ganó su confianza y su aprecio por su lealtad y participación efectiva en las actividades de la pandilla.
“Francisco Villa” recibe un balazo y en su lecho de muerte, nombra a Doroteo Arango como su sucesor y nuevo jefe de la pandilla. En señal de reconocimiento y de agradecimiento a su predecesor, Doroteo Arango, decide adoptar para sí el nombre de Francisco Villa o Pancho Villa.
“Francisco Villa” recibe un balazo y en su lecho de muerte, nombra a Doroteo Arango como su sucesor y nuevo jefe de la pandilla. En señal de reconocimiento y de agradecimiento a su predecesor, Doroteo Arango, decide adoptar para sí el nombre de Francisco Villa o Pancho Villa.
Doroteo Arango, ahora bajo el pseudónimo de Pancho Villa, continúa con las actividades delictivas de la pandilla. Regresa a la hacienda en dónde mató a Agustín López Negrete y ahora mata al cuñado de éste y sus hombres, que lo habían estado buscando para matarlo.
Después de estos hechos, Pancho Villa regresa a la sierra para huir de las tropas federales que lo perseguían por los asesinatos, asaltos, robo de trenes y otros delitos cometidos. Empieza a defender las causas de la gente obrera y campesina, que eran explotados y trabajaban en condiciones muy parecidas a la esclavitud. Su nombre empieza s ser famoso entre los peones de las haciendas y de los pueblos del Norte de México.
Empieza a crecer el nombre y la fama de Pancho Villa y el surgimiento de corridos, canciones y leyendas populares entre la gente humilde, que contaban sus hazañas.
Durante muchos años hasta antes de 1910 se dedicó a ayudar a gente pobre que era explotada en las haciendas y otros lugares de trabajo en donde se les explotaba. Llegó a ser conocido en Chihuahua, Durango, Coahuila y Sinaloa. Durante estos años fue conocido como “El amigo de los Pobres".
Al ver la popularidad que Madero iba adquiriendo y las amplias posibilidades que tenía de derrotar a Porfirio Díaz en las elecciones, fue detenido en la ciudad de Monterrey el día 7 de junio de 1910 y puesto en “libertad vigilada” en San Luis Potosí por órdenes del gobierno, bajo los cargos de conato de rebelión y ultraje a las autoridades. Con Francisco I Madero imposibilitado para continuar en las elecciones, Porfirio Díaz fue reelegido nuevamente para ocupar la presidencia de México.
Hijo de Agustín Arango y María Micaela Arámbula, mestizos de origen humilde y sin estudios. Él tampoco tuvo oportunidad de ir a la escuela, aunque si aprendió a leer. Quedó huérfano siendo aún niño, trabajó como leñador, agricultor y comerciante.
En el año 1984, a la edad de 16 años, entró a trabajar como peón en la hacienda Sombreretillo de la familia López Negrete y ese mismo año tuvo que huir al asesinar al dueño de la hacienda, Agustín López Negrete quien violó a su hermana mayor. Doroteo Arango empieza a ser perseguido por este hecho y huye, y se va a vivir a la sierra en dónde estuvo a punto de perder la vida a causa del hambre.
Se une a una pandilla de bandidos encabezada por un hombre llamado “Francisco Villa”, del cual se ganó su confianza y su aprecio por su lealtad y participación efectiva en las actividades de la pandilla.
“Francisco Villa” recibe un balazo y en su lecho de muerte, nombra a Doroteo Arango como su sucesor y nuevo jefe de la pandilla. En señal de reconocimiento y de agradecimiento a su predecesor, Doroteo Arango, decide adoptar para sí el nombre de Francisco Villa o Pancho Villa.
“Francisco Villa” recibe un balazo y en su lecho de muerte, nombra a Doroteo Arango como su sucesor y nuevo jefe de la pandilla. En señal de reconocimiento y de agradecimiento a su predecesor, Doroteo Arango, decide adoptar para sí el nombre de Francisco Villa o Pancho Villa.
Doroteo Arango, ahora bajo el pseudónimo de Pancho Villa, continúa con las actividades delictivas de la pandilla. Regresa a la hacienda en dónde mató a Agustín López Negrete y ahora mata al cuñado de éste y sus hombres, que lo habían estado buscando para matarlo.
Después de estos hechos, Pancho Villa regresa a la sierra para huir de las tropas federales que lo perseguían por los asesinatos, asaltos, robo de trenes y otros delitos cometidos. Empieza a defender las causas de la gente obrera y campesina, que eran explotados y trabajaban en condiciones muy parecidas a la esclavitud. Su nombre empieza s ser famoso entre los peones de las haciendas y de los pueblos del Norte de México.
Empieza a crecer el nombre y la fama de Pancho Villa y el surgimiento de corridos, canciones y leyendas populares entre la gente humilde, que contaban sus hazañas.
Durante muchos años hasta antes de 1910 se dedicó a ayudar a gente pobre que era explotada en las haciendas y otros lugares de trabajo en donde se les explotaba. Llegó a ser conocido en Chihuahua, Durango, Coahuila y Sinaloa. Durante estos años fue conocido como “El amigo de los Pobres".
Pancho Villa y su participación en la Revolución Mexicana
En 1910, Francisco I. Madero, se postula para la presidencia de México, como candidato del Partido Nacional Antireeleccionista, mismo que él fundó en 1909, con la intención de no permitir la reelección de Porfirio Díaz, quien llevaba en el cargo desde 1876, con un paréntesis entre 1880 -1884 en que ocupó el cargo Manuel del Refugio “El Manco” González Flores.Al ver la popularidad que Madero iba adquiriendo y las amplias posibilidades que tenía de derrotar a Porfirio Díaz en las elecciones, fue detenido en la ciudad de Monterrey el día 7 de junio de 1910 y puesto en “libertad vigilada” en San Luis Potosí por órdenes del gobierno, bajo los cargos de conato de rebelión y ultraje a las autoridades. Con Francisco I Madero imposibilitado para continuar en las elecciones, Porfirio Díaz fue reelegido nuevamente para ocupar la presidencia de México.
En octubre de 1910, Madero elude la vigilancia a que estaba sujeto y huye a San Antonio, Texas, en dónde hizo público su Plan de San Luis el día 20 de noviembre de ese mismo año, en el que incitaba al pueblo a levantarse en armas en contra del gobierno de Porfirio Díaz, y la promesa de la restitución de las tierras que les habían sido arrebatadas a los campesinos durante el Porfiriato (1876-1911).
Al estallar la Revolución Mexicana en 1910, por invitación de su compadre Eleuterio Soto empieza a participar en la lucha revolucionaria y posteriormente por medio de Abraham González quien era el representante político de Francisco I. Madero en Chihuahua, quien lo invitó de manera formal a participar en el mundo de la política y
de la lucha armada.
Aprovechando su conocimiento del territorio del norte el país y a que lo seguían miles de campesinos despojados de tierras, formó su propio ejército en el norte de México. Su experiencia de dos décadas en las montañas, burlando y atacando a las fuerzas del orden que lo perseguían, el numeroso ejército que formó, su carisma, su poder de convocatoria y su fortuna valuada en 353 pesos de oro, los puso a disposición de Francisco I, Madero.
Pancho Villa y Victoriano Huerta
Francisco Villa pasó a formar parte de la División del Norte Federal bajo las órdenes de Victoriano Huerta, con el que participó en las batallas de Tlahuillo. Sierra de Banderas, Conejos y Rellano y fue ascendido a General Brigadier Honorario después de haberse adherido al Plan de Guadalupe.
También participó en batallas de San Andrés, Santa Isabel, Ciudad Camargo, Las Escobas y Estación Bauche contra el General Manuel García Pueblita. Participo en la Batalla de Ciudad Juárez contra el General Juan N. Navarro a quien intentó fusilar en contra de las instrucciones del propio Francisco I. Madero.
Después de la toma de Torreón, se hace de los primeros trenes que posteriormente servirían para transportar contingentes de la División del Norte.
Debido a sus logros militares, Villa se ganó en nombre de El Centauro del Norte.
El ejército de Villa, contribuyó de manera significativa al rápido triunfo del movimiento revolucionario. Bastaron solo seis meses, a pesar de algunas derrotas tempranas, para que el ejército del dictador Porfirio Díaz fuera derrotado.
Tras la derrota y toma de Ciudad Juárez, en mayo de 1911, Porfirio Díaz renunció a la presidencia y fue exiliado. Francisco I. Madero regresa a la capital y participa en las nuevas elecciones para elegir presidente, y las gana, tomando posesión de su cargo de presidente el 6 de noviembre de 2011.
En 1912, Emiliano Zapata que había apoyado a Madero y ante la falta de avances en la aplicación del Plan de San Luis, desconoció su autoridad y lo tachó de traidor. Lo mismo hizo Pascual Orozco en el norte del país y encabezó una sublevación armada en contra de Madero en marzo de 1912. Francisco Villa se mantuvo leal a Madero.
Francisco I. Madero, confió en las habilidades militares de Victoriano Huerta, ex general del ejército porfirista, al que envía para terminar con la sublevación de Pascual Orozco, quien al igual que Villa, era originario de Chihuahua.
Victoriano Huerta acude a Pancho Villa, y su División del Norte, y a las fuerzas maderistas de Chihuahua y los pone como fuerza de avanzada para combatir a Pascual Orozco, al tiempo que él y los federales se quedan en la retaguardia en Torreón, Coahuila. Las fuerzas al mando de Villa, derrotan a Orozco en Conejos, Rellano y Bachimba, retomando el control de las plazas de Chihuahua y Ciudad Juárez. Tras la derrota y de ser herido en Ojinaga, Orozco huye hacia los Estados Unidos.
Después de esta victoria y ante la desconfianza de Huerta hacia Villa, lo acusó de insubordinación por haber desobedecido una orden suya, consiste en la devolución de un caballo pura sangre, que supuestamente Villa le había robado a un personaje de la localidad. Victoriano Huerta hizo comparecer a Pancho Villa a un consejo de guerra en el que en quince minutos se decidió que Villa debía ser fusilado. Otra versión dice que Villa no cumplió con una orden enviada por Huerta vía telégrafo y que Villa negó haber recibido.
Francisco I. Madero, le salvó la vida a Villa mediante la intervención de su hermano Raúl Madero y de Guillermo Rubio Navarrete.
Villa fue trasladado a la Ciudad de México y recluido en la cárcel de Lecumberri es dónde estuvo preso de junio a noviembre de 1912. En diciembre del mismo año es trasladado a la prisión de Santiago Tlatelolco de donde se fugó el día 24 de diciembre a las 3 de la tarde. Se dice que en este periodo fue que aprendió a leer y escribir, ayudado por Gildardo Magaña Cerda. Villa se escapó de la cárcel con la ayuda de Carlos Jauregui, escribiente del juzgado y huyó hacia El Paso, Texas, pasando previamente por Guadalajara y Manzanillo, en dónde recibió ayuda económica por parte del Gobernador de Sonora José María Maytorena.
También participó en batallas de San Andrés, Santa Isabel, Ciudad Camargo, Las Escobas y Estación Bauche contra el General Manuel García Pueblita. Participo en la Batalla de Ciudad Juárez contra el General Juan N. Navarro a quien intentó fusilar en contra de las instrucciones del propio Francisco I. Madero.
Después de la toma de Torreón, se hace de los primeros trenes que posteriormente servirían para transportar contingentes de la División del Norte.
Debido a sus logros militares, Villa se ganó en nombre de El Centauro del Norte.
El ejército de Villa, contribuyó de manera significativa al rápido triunfo del movimiento revolucionario. Bastaron solo seis meses, a pesar de algunas derrotas tempranas, para que el ejército del dictador Porfirio Díaz fuera derrotado.
Tras la derrota y toma de Ciudad Juárez, en mayo de 1911, Porfirio Díaz renunció a la presidencia y fue exiliado. Francisco I. Madero regresa a la capital y participa en las nuevas elecciones para elegir presidente, y las gana, tomando posesión de su cargo de presidente el 6 de noviembre de 2011.
En 1912, Emiliano Zapata que había apoyado a Madero y ante la falta de avances en la aplicación del Plan de San Luis, desconoció su autoridad y lo tachó de traidor. Lo mismo hizo Pascual Orozco en el norte del país y encabezó una sublevación armada en contra de Madero en marzo de 1912. Francisco Villa se mantuvo leal a Madero.
Francisco I. Madero, confió en las habilidades militares de Victoriano Huerta, ex general del ejército porfirista, al que envía para terminar con la sublevación de Pascual Orozco, quien al igual que Villa, era originario de Chihuahua.
Victoriano Huerta acude a Pancho Villa, y su División del Norte, y a las fuerzas maderistas de Chihuahua y los pone como fuerza de avanzada para combatir a Pascual Orozco, al tiempo que él y los federales se quedan en la retaguardia en Torreón, Coahuila. Las fuerzas al mando de Villa, derrotan a Orozco en Conejos, Rellano y Bachimba, retomando el control de las plazas de Chihuahua y Ciudad Juárez. Tras la derrota y de ser herido en Ojinaga, Orozco huye hacia los Estados Unidos.
Después de esta victoria y ante la desconfianza de Huerta hacia Villa, lo acusó de insubordinación por haber desobedecido una orden suya, consiste en la devolución de un caballo pura sangre, que supuestamente Villa le había robado a un personaje de la localidad. Victoriano Huerta hizo comparecer a Pancho Villa a un consejo de guerra en el que en quince minutos se decidió que Villa debía ser fusilado. Otra versión dice que Villa no cumplió con una orden enviada por Huerta vía telégrafo y que Villa negó haber recibido.
Francisco I. Madero, le salvó la vida a Villa mediante la intervención de su hermano Raúl Madero y de Guillermo Rubio Navarrete.
Villa fue trasladado a la Ciudad de México y recluido en la cárcel de Lecumberri es dónde estuvo preso de junio a noviembre de 1912. En diciembre del mismo año es trasladado a la prisión de Santiago Tlatelolco de donde se fugó el día 24 de diciembre a las 3 de la tarde. Se dice que en este periodo fue que aprendió a leer y escribir, ayudado por Gildardo Magaña Cerda. Villa se escapó de la cárcel con la ayuda de Carlos Jauregui, escribiente del juzgado y huyó hacia El Paso, Texas, pasando previamente por Guadalajara y Manzanillo, en dónde recibió ayuda económica por parte del Gobernador de Sonora José María Maytorena.
Victoriano Huerta traiciona a Francisco I. Madero
A principios del mes de febrero de 1913, Victoriano Huerta, el traidor, toma prisioneros a Madero y su vicepresidente José María Pino Suárez y los obliga a renunciar a sus cargos, y con el aval del congreso se nombra presidente interino a Pedro Lascuráin, quien dura en su cargo 45 minutos y dimite a favor de Victoriano Huerta para que asumiera la “Presidencia Constitucional”
El día 22 del mismo mes de febrero, al ser conducidos a la prisión de Lecumberri, Madero y Pino Suarez son tomados por un grupo de sicarios y no lejos de la cárcel los asesinaron brutalmente. El “Gobierno” de Huerta para justificar la acción, informó que las gentes que se llevaron a ambos personajes estaban intentando liberarlos y que ambos políticos murieron como consecuencia del fuego cruzado que se dio entre las fuerzas que los custodiaban y los supuestos bandidos que intentaban liberarlos.
El día 22 del mismo mes de febrero, al ser conducidos a la prisión de Lecumberri, Madero y Pino Suarez son tomados por un grupo de sicarios y no lejos de la cárcel los asesinaron brutalmente. El “Gobierno” de Huerta para justificar la acción, informó que las gentes que se llevaron a ambos personajes estaban intentando liberarlos y que ambos políticos murieron como consecuencia del fuego cruzado que se dio entre las fuerzas que los custodiaban y los supuestos bandidos que intentaban liberarlos.
Pancho Villa y Venustiano Carranza
Ante estos hechos, Villa regresa a México en abril de 1913 para combatir a Victoriano Huerta. En un mes, Villa reúne a 3,000 personas y forma nuevamente su División del Norte y se une a las fuerzas de Emiliano Zapata y del Ejército Constitucionalista de Venustiano Carranza, Gobernador de Coahuila, cuya objetivo era derrocar al usurpador Victoriano Huerta restablecer el orden y la legalidad constitucional. Venustiano Carranza contaba dentro de sus hombres de confianza y estratega militar al General Álvaro Obregón.
Villa y su División del Norte, durante 1913 toma el control de Chihuahua y de todo el norte del país.
Durante esta etapa de lucha contra Victoriano Huerta, Villa acató la jefatura y liderazgo de Venustiano Carranza, sin embrago llegaron a tener fricciones y discrepancias entre ellos.
En junio de 1914 Villá tomó Zacatecas, victoria que resultó decisiva en la lucha contra Huerta que provocó le renuncia de éste y su posterior exilio.
La toma de Zacatecas hecha por Villa fue hecha en contravención a las órdenes de Carranza, que buscaba evitar que Villa se acercara a la capital. Este desacato provocó fricciones entre ambos jefes, que finalmente quedaron resueltas con la firma del Pacto de Torreón, celebrado del cuatroal ocho de julio de 1914 que tuvo como sede el edificio del Banco de Coahuila ubicado en Torreón. En el pacto se acordaba, entre otras cosas, que al asumir Carranza el poder, establecería un gobierno encabezado por civiles tanto villistas como carrancistas y que ningún jefe podría presentarse como candidato a la presidencia.
A pesar de la firma del pacto, el distanciamiento entre ambos era muy notorio, al grado que en agosto
Villa y su División del Norte, durante 1913 toma el control de Chihuahua y de todo el norte del país.
Durante esta etapa de lucha contra Victoriano Huerta, Villa acató la jefatura y liderazgo de Venustiano Carranza, sin embrago llegaron a tener fricciones y discrepancias entre ellos.
En junio de 1914 Villá tomó Zacatecas, victoria que resultó decisiva en la lucha contra Huerta que provocó le renuncia de éste y su posterior exilio.
La toma de Zacatecas hecha por Villa fue hecha en contravención a las órdenes de Carranza, que buscaba evitar que Villa se acercara a la capital. Este desacato provocó fricciones entre ambos jefes, que finalmente quedaron resueltas con la firma del Pacto de Torreón, celebrado del cuatroal ocho de julio de 1914 que tuvo como sede el edificio del Banco de Coahuila ubicado en Torreón. En el pacto se acordaba, entre otras cosas, que al asumir Carranza el poder, establecería un gobierno encabezado por civiles tanto villistas como carrancistas y que ningún jefe podría presentarse como candidato a la presidencia.
A pesar de la firma del pacto, el distanciamiento entre ambos era muy notorio, al grado que en agosto
de 1914, los constitucionalistas entraron a la Ciudad de México pero el General Álvaro Obregón taponó la entrada de villistas y zapatistas. Obregón intento que ambos eliminaran sus diferencias, fue hecho prisionero por Villa y lo condenó a muerte para finalmente indultarlo.
Convención de Aguascalientes
El 1° de octubre de 1914, Venustiano Carranza convoca la celebración de la Soberana Convención de Aguascalientes que se celebró del 10 de octubre al 9 de noviembre de 1914, el nombre original fue Gran convención de jefes militares con mando de fuerzas y gobernadores de los Estados. Las primeras sesiones se celebraron en la Cámara de Diputados de la Ciudad de México y se continuaron en el Teatro Morelos en Aguascalientes por lo cual la reunión finalmente se conoció bajo el nombre de la Convención de Aguascalientes.Durante la convención se puso de manifiesto que había enormes diferencias al interior de las fuerzas revolucionarias. Venustiano Carranza y Álvaro Obregón eran los representantes del constitucionalismo moderado y Villa y Zapata representaban la revolución campesina y el anhelo de una inmediata repartición de tierras.
La convención sirvió para consolidar el acercamiento entre los villistas y los zapatistas, adoptándose principalmente el programa político villista y el predominio militar villista.
Como producto de la convención, el 1° de noviembre de 1914, se eligió al General Eulalio Gutiérrez Ortíz como Presidente Interino de la República, cargo que ocupó hasta el 2 de junio de 1915.
Villa y Zapata no aceptaron disolver sus tropas y a reconocer la autoridad de Carranza, quien decidió retirarse a Veracruz y establecer allí su gobierno.
Pancho Villa y Emiliano Zapata
Villa y Zapata no aceptaron disolver sus tropas y a reconocer la autoridad de Carranza, quien decidió retirarse a Veracruz y establecer allí su gobierno.
El día 6 de diciembre de 1914, Villa y Zapata entran a la Ciudad de México con el Ejército convencionalista formado por 60,000 hombres, en apoyo al recién electo presidente Eulalio Gutiérrez.
En enero de 1915, el general Álvaro Obregón ocupó la Altiplanicie Meridional mexicana (Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Distrito Federal y parte de los estados de Zacatecas, Michoacán, Hidalgo y Jalisco).
Pancho Villa enfrenta a Venustiano Carranza
Villa, en lugar de replegarse hacia el norte para reforzar y acrecentar su ejército, decidió enfrentarse al Ejército Constitucionalista en el centro del país y fue derrotado por Álvaro Obregón en cuatro batallas consecutivas que se celebraron entre los meses de abril y julio de 191,5 entre las ciudades de Celaya y Aguascalientes. Se estima que cada ejército estaba compuesto por un número aproximado de 40,000 efectivos. En la tercera de ellas, Álvaro Obregón perdió el brazo derecho a causa de una granada.
Estas victorias militares de Álvaro Obregón. Permitieron que Venustiano Carranza se hiciera con el poder e instalara nuevamente su gobierno en la capital de la República. Meses antes, desde el 16 de enero de 1915, Eulalio Gutiérrez, había trasladado su gobierno a San Luis Potosí , habiendo renunciado a su cargo el día 2 de junio de 1915, no sin antes haber declarado que Villa y Carranza habían traicionado el “espíritu revolucionario”.
Tras ser derrotado, en julio de 1915, Pancho Villa regresó al norte con un pequeño ejército de apenas mil hombres.
En octubre de 1915, el gobierno de Venustiano Carranza es reconocido por el gobierno estadounidense del presidente Woodrow Wilson.
Tras ser derrotado, en julio de 1915, Pancho Villa regresó al norte con un pequeño ejército de apenas mil hombres.
En octubre de 1915, el gobierno de Venustiano Carranza es reconocido por el gobierno estadounidense del presidente Woodrow Wilson.
Pancho Villa ataca Columbus, Nuevo México
Con el propósito de desacreditar y enemistar a Carranza con los Estados Unidos y demostrar que éste no tenía el control del país, Villa trató de provocar una intervención norteamericana que obligará a Carranza a pactar con los norteamericanos y así aparecer él como el auténtico representante de la lucha patriótica y recuperar el terreno perdido en su lucha.
El 10 de enero de 1916, los villistas asesinaron a quince ciudadanos norteamericanos que viajaban en un tren, esperando una reacción del gobierno norteamericano, pero el incidente solo dio lugar a protestas diplomáticas. Ante este poco impacto, el 9 de marzo, Villa y 589 miembros de su ejército incursionaron en el pueblo de Columbus, Nuevo México y atacaron un destacamento de caballería del ejército estadounidense en el que murieron 37 soldados y 20 civiles, siendo tomados como prisioneros 7 villistas.
En esta ocasión si hubo respuesta del gobierno estadounidense pero fue con el carácter de “punitiva” y tenía solo como propósito capturar a los rebeldes villistas sin que esto implicara alguna represalia en contra del gobierno mexicano.
El presidente Wilson envió un ejército al norte de México con el propósito de acabar con Pancho Villa. Al frente de este ejército estuvo el general John J. Pershing. Este intento por capturar a Villa, empezó el 4 de marzo de 1916 y concluyó el 17 de febrero de 1917 en que el ejército de Estados Unidos se retiró de México, sin que lo hayan podido capturar. El conocimiento del terreno y el apoyo de la gente le permitieron a Villa evadir al ejército estadounidense durante este tiempo.
Después de esta persecución, Villa y su ejército se mantuvieron gracias a actividades que mediaban entre la guerrilla y el bandolerismo.
El 10 de enero de 1916, los villistas asesinaron a quince ciudadanos norteamericanos que viajaban en un tren, esperando una reacción del gobierno norteamericano, pero el incidente solo dio lugar a protestas diplomáticas. Ante este poco impacto, el 9 de marzo, Villa y 589 miembros de su ejército incursionaron en el pueblo de Columbus, Nuevo México y atacaron un destacamento de caballería del ejército estadounidense en el que murieron 37 soldados y 20 civiles, siendo tomados como prisioneros 7 villistas.
En esta ocasión si hubo respuesta del gobierno estadounidense pero fue con el carácter de “punitiva” y tenía solo como propósito capturar a los rebeldes villistas sin que esto implicara alguna represalia en contra del gobierno mexicano.
El presidente Wilson envió un ejército al norte de México con el propósito de acabar con Pancho Villa. Al frente de este ejército estuvo el general John J. Pershing. Este intento por capturar a Villa, empezó el 4 de marzo de 1916 y concluyó el 17 de febrero de 1917 en que el ejército de Estados Unidos se retiró de México, sin que lo hayan podido capturar. El conocimiento del terreno y el apoyo de la gente le permitieron a Villa evadir al ejército estadounidense durante este tiempo.
Después de esta persecución, Villa y su ejército se mantuvieron gracias a actividades que mediaban entre la guerrilla y el bandolerismo.
La Muerte de Pancho Villa
Tras ser asesinado Venustiano Carranza el 21 de mayo de 1920, el presidente interino Adolfo de la Huerta (junio-novimbre de 1920), le ofrece una amnistía y una hacienda en Parral, Chihuahua, llamada Hacienda El Canutillo, a cambio de que cesara sus actividades militares y se retirara de la política. Villa aceptó la propuesta, depuso las armas y se retiró a la hacienda junto con ochenta ex compañeros de armas en dónde trato de formar una colonia militar.
Durante los siguientes tres años, Villa sufrió numerosos atentados de los que salió ileso.
El 20 de julio de 1923, cuando entraba a Parral junto con seis escoltas, fue atacado desde una casa en ruinas por un grupo de sicarios al mando de Jesús Salas, quienes lograron matarlo.
Detrás de este asesinato, estuvieron el presidente Álvaro Obregón (1920-1924) que estaba en funciones y quien sería su sucesor, Plutarco Elías Calles (1924-1928), quienes estaban temerosos de que Villa pudiera apoyar a Adolfo de la Huerta, que aspiraba a ser sucesor de Álvaro Obregón a la presidencia.
En febrero de 1926, su tumba fue profanada y robada su cabeza.
En 1976 los restos mortales del Centauro el Norte fueron trasladados al Monumento a la Revolución.
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